Para conmemorar los XXV años de la Virgen del Sol, la Hermandad del Plantinar ha celebrado el pasado fin de semana un besamanos extraordinario en honor a su titular Mariana.
Extraordinario es sin duda la primera palabra que se nos viene en mente al ver el besamanos de la Virgen del Sol del pasado fin de semana. La Virgen estaba colocada bajo su antiguo palio pintado y vestía una saya color rojo y un manto verde esperanza igualmente pintados.
Entre la penumbra resurgía una luz que iluminaba el rostro de la dolorosa en una estampa única, que junto el olor a incienso mezclado con el del exorno floral creaban una atmósfera mágica en San Diego de Alcalá.
El Señor estaba colocado junto al altar mayor de la Parroquia para hacer espacio en la capilla y que cupiera todo lo necesario para crear uno de los besamanos más maravillosos que se han vivido en el Sol. No faltaron el San Juan y la Magdalena las obras de Jose Manuel Bonilla vestían de blanco detrás de la Virgen en dos oscuros rincones, siempre con ella, siempre consolando un Sol que brilla cada Sábado Santo.
GALERÍA:
Fotografía: Juan Martín Rodríguez
Derechos de Autor Reservados
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| Juan Martín Rodríguez |
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| Juan Martín Rodríguez |
El Señor estaba colocado junto al altar mayor de la Parroquia para hacer espacio en la capilla y que cupiera todo lo necesario para crear uno de los besamanos más maravillosos que se han vivido en el Sol. No faltaron el San Juan y la Magdalena las obras de Jose Manuel Bonilla vestían de blanco detrás de la Virgen en dos oscuros rincones, siempre con ella, siempre consolando un Sol que brilla cada Sábado Santo.
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Fotografía: Juan Martín Rodríguez
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